Vivencia.

El pasado fin de semana tuvo lugar el mercado medieval, que como todos los años, se lleva a cabo en el propio casco histórico. El promotor de este fin de semana medieval es el ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz; y los integrantes son las tiendas de Vitoria de tipo artesanal. El tipo de actividad es totalmente cultural, aunque ahora con los conocimientos que nos ha dado animación turística, podemos darle un sentido también turístico.

El contenido principal es “crear una ambientación medieval en un lugar cotidiano para las personas de Vitoria, en el cual tendrán lugar actuaciones, y donde podrán comprar en las tiendas tradicionales de una manera diferente y creativa”. El mercado medieval es una forma de fomentar el comercio, las visitas turísticas y enriquecer la vida cultural de la ciudad.

La asistencia a este tipo de eventos suele ser mucha. El animador cultural aquí no se encuentra en la parte del comercio, puede ser la persona capacitada para organizar tal entramado de actividades e incluso para protagonizarla. Desde los soldados, la corte, bufones, hasta las personas a las que no vemos pero han estado presentes anteriormente para crear esa actividad.

El mercado medieval es una actividad que se da en muchas ciudades, antes que en Vitoria ya estaba en Burgos, y no deja de ser una ciudad que a parte de aumentar los ingresos de los pequeños comercios, fomenta la compra en ellos y hace que la ciudad tenga diferente color.

El espacio estaba muy bien ubicado y decorado, además de tener una amplia variedad de dinstintas actividades organizdas en diferentes espacios unos cerca de otros. Tanto los trajes como la ambientación de los puestos, la organización de los dinstitons elementos y funciones que formaban parte del mercaado estaban muy bien cuadrados.

Es una actividad con dimensión instrumental para el ciudadano de a pie y con dimensión finalista para el ayuntamiento, podemos considerarla parte de la democratización cultural aunque no en sus concepto más restringido, ya que fomenta la participación social aunque sea de los vendedores de pequeños comercios.